Las imágenes de tejidos profundos utilizando proteínas fluorescentes permiten observaciones de procesos biológicos de manera directa y no invasiva dentro de organismos vivos. La mayor dificultad que tienen las imágenes fluorescentes entre los animales es la absorción de luz por la melanina y la hemoglobina, al igual que la dispersión de la luz. Tanto la absorción como la dispersión de la luz se vuelven menos pronunciadas al incrementarse la longitud de onda. La “ventana óptica” óptima es más transparente para la visualización de en tejidos vivos, está considerada por estar entre 650-700 y 110nm. Por lo tanto, el uso de proteínas fluorescentes rojo lejano o infrarrojo cercano incrementan drásticamente la sensibilidad de la imagen en todo el cuerpo comparándola con la imagen convencional de los FPs.
Evrogen ofrece vectores que codifican para proteínas rojo lejano e infrarrojo cercano perfectamente adecuadas para dichas aplicaciones.